10 razones principales para ir al psicólogo

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Cuando me presento ante los demás como psicólogo, usualmente tengo una respuesta positiva. Eso me da mucho gusto en verdad, ya que ha cambiado bastante la mentalidad de la gente respecto a nuestra profesión. Ya no todo mundo nos ve como "loqueros" o se sienten "psicoanalizados". Lo que me he dado cuenta es que ahora la gente me dice: "¿Apoco no todos necesitamos ir de vez en cuando? Y sí, de hecho para la mayoría de la gente no estaría nada mal, por salud mental. Aquí presento las razones más importantes por las cuáles ir con un psicólogo te podría ayudar.

1. Todo ser humano necesita ser escuchado sin ser juzgado. Es muy incómodo el ser reprimido y no tener la capacidad de decir lo que expresamos. Es una necesidad básica para el ser humano ser comprendido y saber que no está solo en el mundo. 
2. Puede ayudarte a comprender el porqué de cómo eres. Un psicólogo bien entrenado es un experto que sabe cómo el comportamiento es influenciado por las reacciones emocionales y los pensamientos de una persona. El conocerte a ti mismo y llevar unas sesiones de psicoterapia puede ayudarte a que cambies patrones viejos de comportamientos que no son muy sanos. 
3. Vas a cambiar. Un psicólogo bien formado puede ayudarte a cambiar los hábitos indeseables que tengas; como por ejemplo el abusar del alcohol, relacionarte con personas tóxicas, etc. Puedes lograr un cambio que de otra forma podría tomarte mucho tiempo. 
4. Vas a ver el mundo de una forma muy diferente. Cuando vas con un psicólogo de orientación cognitivo conductual, aprenderás a ser más objetivo y no dejar que algunos asuntos sin importancia te arruinen tu día.
5. Vas a ser más resolutivo. En vez de quejarte por todo lo que te pasa, vas a aprender a cómo poder solucionar tus problemas y enfrentarte a nuevos retos. 
6. Es una inversión a largo plazo. Lo que aprendes en la terapia no se olvida por completo ni deja de ser usado. Un buen terapeuta te ayuda a integrar a largo plazo los cambios y ayudarte a no volver a caer en los pasos en los que ibas. 
7. Vas a sentirte más seguro. Literalmente, aprenderás técnicas que el resto de las personas no tienen; cómo manejar tus emociones, cómo pensar diferente y cómo cambiar tu conducta. 
8. Vas a hacerte responsable de tu vida. No serás más una bolsa de plástico que cambia conforme el viento, serás más estable, reconocerás el rol en el que estás y cómo solucionarlo.
9. Dejarás la culpa atrás. Podrás hacerte responsable de tus errores sin seguirte machacando todos los días por tus errores.
10. No volverás a caer en episodios graves de depresión o ansiedad. Estarás preparado para ellos y no será lo mismo nunca más.